¿Aún no tienes una cuenta? Crea una ahora y accede a tus listas favoritas, tu histórico de cuentas y muchas más cosas...
Pedidos y atención al cliente
TLF: 963 392 051 / FAX: 963 615 480
1ª Edición / 423 págs. / Rústica / Castellano/Inglés / Libro
Por la compra de este libro en papel tendrá acceso a las siguientes promociones (CÓDIGO PROMOCIONAL INCLUÍDO EN EL INTERIOR DEL LIBRO):
Libro electrónico*: |
21,00 € | |
En papel: En stock, entrega en 24-48h |
|
|
Consultar disponibilidad en tiendas
Consultar disponibilidad en tiendasLos plazos estimados son para pedidos realizados antes de las 14:00h del viernes (salvo error o situaciones especiales: festivos, inventarios,etc).
|
||
*Para visualizar los libros electrónicos debe tener instalado Adobe Digital Edition en su equipo. Para conocer más pulse aquí. |
A nadie escapa que nuestra sociedad se está haciendo paulatinamente más dependiente de las tecnologías que nunca. Al mismo tiempo, el Derecho de las tecnologías de la información y la comunicación (Derecho TIC) se ha ido asentando como una rama más de la ciencia jurídica. Así lo atestigua la aparición de asignaturas sobre la materia en los estudios de grados de nuestras universidades, de programas de master o de doctorado específicos o, como es el caso del Magister Lvcentinvs en Propiedad industrial e intelectual de la Universidad de Alicante, de módulos de masters o cursos de especialista. Del mismo modo, los despachos de abogados han ido abriendo sus departamentos de TIC (o de "IT"). Al contrario que otras disciplinas jurídicas, el Derecho TIC no puede considerarse como una rama con autonomía propia. Todo lo contrario: sin el conocimiento previo de otras ramas del Derecho, una persona no puede considerarse como "experto en Derecho TIC". Muestra de ello es que los departamentos de TIC de los despachos se crean a partir de otros departamentos ?generalmente los de propiedad industrial e intelectual? y precisan de trabajar en colaboración con esos otros departamento. No vamos, por ejemplo a predicar y defender la "autonomía" del Derecho TIC, atributos más acordes con épocas pasadas de la ciencia jurídica que deberíamos enterrar para siempre. Es más, el carácter interdisciplinar del Derecho TIC va más allá de la ciencia del Derecho, por cuanto para controlar la materia es preciso tener un buen grado de conocimiento de las tecnologías de la información y la comunicación o, alternativamente, contar con la colaboración de expertos en estas materias.