El libro de las maravillas

Se publica en esta edición uno de los espléndidos manuscritos franceses de la Edad media: El libro de las Maravillas del Mundo (Le Livre des Merveilles du Monde, París, Bibliothéque Nationale, ms. Fr. 2810) que recoge el diario del viaje de Marco Polo al Extremo Oriente bellísimamente ilustrado. El comerciante veneciano Marco Polo (1254-1324) atravesó Asia durante cuatro años y alcanzó Pelín en 1275; allí fue recibido por el Kubilai Khan, y se quedó en su corte, al servicio del emperador, durante diecisiete años. Según la tradición, Marco Polo estuvo en prisión en 1298 y allí, narró toda su aventura a su compañero de celda. Basada en el relato de este compañero, se hizo la transcripción en lengua francesa. Durante siglos, estas memorias fueron consideradas como el manual geográfico más importante sobre Extremo Oriente. El manuscrito, ricamente ilustrado, fue encargado por Juan sin Miedro, duque de Borgoña en 1410 y posteriormente se lo regaló a su tío, el duque de Berry. A partir de 1523, el códice pasó a pertenecer a la Corona de Francia. Desde su creación, este manuscrito no ha dejado de fascinar y de suscitar la admiración de todos. Un numeroso personal artístico participó en su realización que consistió en transcribir sobre 299 folios de pergamino de gran formato este extraño texto que evocaba las "Maravillas" del lejano Oriente y en ilustrarlo profusamente con numerosas miniaturas. Raramente, un manuscrito profano fue decorado con tanta finura y elegancia: realidad y fantasía se unen intrínsecamente en la configuración de la vida y las costumbres de otro continente. El presente libro contiene la traducción del texto original de Marco Polo y reproduce íntegramente y a todo color las 84 miniaturas de las que se amplían, a veces, a doble página, los fastuosos y coloristas detalles que las componen ofreciendo al lector una espectacular visión de la concepción que se tenía en la Edad Media sobre el mundo oriental. El delicioso contenido, casi de fábula, de la obra así como el inapreciable valor artístico de sus miniaturas hacen que esta obra sea una de las joyas más valiosas de la miniatura frances.